Capitulo 49.
En ese momento comenzó un beso, un beso largo, el cuál siguió hasta que Peter se separó y sacó mi remera, todo era diferente, era mas tierno que de costumbre. Él pasaba sus manos por mi espalda, por mi cuello, el cuál fue besado varias veces. Sin perder más tiempo saqué su remera y él corrió a mi boca nuevamente mientras con sus manos tanteaba la prendidura de mi corpiño el cuál cayó en el suelo junto con las demás prendas. Los besos comenzaron tomar velocidad, Peter sacó el short de mi piyama para solo quedar vestida de una prenda. Sus manos recorrían cada parte de mi cuerpo; el boxer que lo cubría lo saqué después un jueguito besando desde su cuello hasta su panza, solo quedaba mi prenda inferior la cuál fue sacada al instante. Los besos seguían, los dos estábamos como dios nos trajo al mundo, disfrutándonos a más no poder, después de una mirada de Peter entró en mí y comenzó con esos movimientos que me hacían sentar única, era el mejor, lo conocía hace poco y ya me importaba tanto… si, seguía siendo mi hermanastro pero en esos momentos eso no me importaba, solo quería disfrutar, cada momento en el que estaba con él era hermoso.
Los movimientos seguían, el dolor se mezclaba con placer, disfrutamos los dos hasta que nuestros cuerpos no podían mas y pedían descansar;
-estás dormida?- yo seguía apoyada en su pecho.
-no, pensaba-
-se puede saber en que?-
-en esto, en nosotros-
-y que somos nosotros?-
-desgraciadamente, hermanastros-
-pero La, no tenemos la misma sangre-
-pero nuestros viejos están juntos-
-nosotros también podemos-
-y queremos…- lo miré y subí para dejar un beso en su boca- va a venir tu vieja, mi viejo, no vamos a poder estar juntos…-
-bueno, no se, estamos a escondidas, hasta que se enteren-
-y ese día morimos-
-no, van a tener que aceptar-
-esperemos que todo salga como decís-
-va a salir bien… ahora dame otro beso- lo miré con una sonrisa y unimos los labios para formar ese beso pedido por él y luego acostarme en su pecho y cerrar los ojos.
Me volví a despertar y Peter no estaba, me levanté tapada con la sábana y salí de la habitación para después ver que Nico seguía durmiendo.
-te despertaste- él salía del baño con un jeans, unas ojotas y su remera con cuello.
-si, que hora es?- me estiré y lo abracé tratando de que no se me vea nada.
-las doce y cuarenta-
-es re tarde, me voy a cambiar- dejó un beso en mi mejilla y entré en el baño para después de unos minutos salir envuelta en un toallón. Pase a mi pieza, ropa interior, un jeans, una remera gris, zapatillas y ya estaba lista; levanté la ropa para llevar algunas prendas a lavar y otras al placard y bajé hacia la cocina en donde Peter miraba la heladera.
-que buscas?- lo abracé por detrás.
-estaba viendo que hacer de comer- y dejó un beso en mi labios.
-estoy antojada de unos ñoquis con pollo-
-entonces ñoquis con pollo será- me abrazó y me dio otro beso- voy a comprar-
-dale-
-y vos, vas a ir poniendo el agua para los ñoquis-
-ok-
-te quiero- otro beso y salió.
Me preparé un te con tostadas y manteca y los comí mientras miraba la televisión, unos diez minutos y puse la olla hasta que alguien tocó el timbre, pensando que era Peter abrí y no era él…